ANTECEDENTES
Desde tiempo inmemorial en nuestra cultura occidental, las distintas Iglesias prestan atención a las peculiares necesidades humanas y espirituales de las personas que, por motivos de diversa índole, viven y trabajan en un ambiente marítimo.
Actualmente, en nuestro ámbito y en el Estado español, esta acción se lleva a cabo a través del Apostolado del Mar, ente integrado en el Consejo Pontificio para la pastoral de personas emigrantes e itinerantes.
Bajo el nombre “Stella Maris”, el Apostolado del Mar está presente en gran número de diócesis marítimas de todo el mundo para ofrecer la atención humana y pastoral específica a la gente del mar y para sostener el esfuerzo de las personas que, de una manera voluntaria y altruista, se sienten llamadas a dar testimonio en ese ambiente específico y en su entorno más inmediato social y familiar.
El Apostolado del Mar, bajo el nombre de «Stella Maris», es una organización internacional, ampliamente conocida por los marinos en todo el mundo; ellos saben que en el lugar donde se coloca este título encontrarán acogida, amistad, ayuda y apoyo desinteresado, sin ningún tipo de discriminación. Sean de donde sean, sean creyentes o no, cristianos o pertenecientes a otra confesión cristiana o religión, a todos los marinos se les da la bienvenida y a cada uno se le intenta ayudar en aquello que pida y necesite desde su dignidad como persona.
Por otro lado, distintos tratados y normas específicas referidas a la gente del mar describen la necesidad de ofrecer este servicio por parte de los puertos. Más reciente esta el Convenio Trabajo Marítimo (CLM2006) de la OIT, que ha sido adoptado por la OMI, y que ha sido signado por el estado español el pasado 20 de agosto de 2013. Como miembro de un país signatario de dichos tratados, el ofrecer estos servicios no es sólo un acto altruista o de buena voluntad sino que es una respuesta a los compromisos que se desarrollan en dichos tratados.
En definitiva, el Apostolado del Mar es el rostro humano de cada puerto y voz de los que a menudo no tienen voz, denunciando abusos y lainjusticia, defendiendo los derechos de la gente de mar y pidiendo a la industria marítima y acada gobierno que respeten los Convenios internacionales.
EL PUERTO DE CASTELLÓN Y EL “STELLA MARIS”
El puerto de Castellón es una instalación muy joven, siempre en crecimiento pero muy lentamente a tenor de los tiempos en que se ha ido desarrollando y al ritmo de las necesidades de la provincia. En los últimos 20 años ha crecido exponencialmente, y además de la influencia provincial se va abriendo a otros proyectos como escaparate a nivel europeo y mundial. Signo de este crecimiento es que Port Castelló aspira a ser un puerto HUB.
En el pasado, los servicios que prestaba el puerto, eran pocos, posiblemente reducidos a los imprescindiblemente necesarios. Pero a medida que ha ido creciendo ha tenido que ir aumentándolos por pura necesidad o por imposiciones internacionales, como se puede aplicar desde ciertos códigos.
Según la Memoria de Port Castelló 2014 (pag. 61) el puerto generó un tráfico de 1.500 buques, la gran mayoría de ellos (1.426) extranjeros, con lo que se genera un movimiento de potenciales tripulantes a los que se debería atender de 30.000 personas.
Lo más importante es que, al igual que en puertos similares y cercanos como el de Tarragona, esto supone la visita de unos 3 buques al día de media.
En estos momentos (sin haber comenzado las visitas directas en los buques y con la colaboración de los consignatarios que distribuyen los folletos informativos) se está atendiendo en tierra, en la sede provisional de la parroquia de San Pedro) a una media de 2 tripulantes por semana. La mayoría de ellos con necesidades de comunicación con sus familias, información de servicios en tierra y asistencia espiritual.
Con el tiempo y la puesta en marcha definitiva del Proyecto se puede elaborar una estadística detallada en la que se pueda responder a la demanda concreta de los marinos desde la oferta que se pueda llegar a brindar a los marinos en tránsito.
Un ejemplo de esas demandas viene dado por el crecimiento del puerto. Hace años un tripulante que tenía su buque en el punto más alejado de la entrada del puerto, iba dándose un paseo hasta llegar al Grao.Hoy en día, y sobre todo desde la apertura del acceso a la dársena sur, tiene que dar un gran rodeo de varios kilómetros, para llegar a ese mismo punto. En muchas ocasiones el sueldo que perciben los marinos no permite pagar transporte público o privado para “salir a tierra”.En este caso, Stella Maris, mediante este proyecto, ayuda a Port Castelló a ofrecer un servicio más, uno más de los que pretende poner a disposición de la Comunidad Portuaria.El Stella Maris nunca ha sido un problema para los Puertos, antes bien los ha evitado.
PROMOTOR DEL PROYECTO
La labor que desarrolla el STELLA MARIS CASTELLÓN está promovida por el Apostolado del Mar de la diócesis de Segorbe-Castellón, erigida canónicamente por el obispo diocesano D. Casimiro López el 28 de julio de 2015 a través de un Decreto firmado en esa fecha.
En dicho Decreto se crea el Secretariado Diocesano del Apostolado del Mar con sede en la Parroquia de San Pedro Apóstol del Grao de Castellón.
En el número 2 de dicho decreto se lee: «El Secretariado Diocesano del Apostolado del Mar es el organismo diocesano para la atención humana, social, espiritual y pastoral de la gente del mar: marinos mercantes, pescadores o marinos de otro tipo, sus familias y trabajadores de los puertos. Tendrá siempre en cuenta los principios, los criterios y directrices de la Obra del Apostolado del Mar».
El Decreto también crea la figura del Director del Secretariado y describe sus tareas y competencias entre las que se encuentran las tareas propias del Stella Maris.
El Secretariado Diocesano del Apostolado del Mar cuenta con el apoyo de la Vicaría Episcopal de Pastoral de nuestra diócesis con la que se articula y se coordina con el resto de la Pastoral general diocesana.